Conocer la palabra «Dios» no es
conocer a Dios. Conocer la palabra «amor» no es conocer el amor. Conocer la
palabra «fuego» no es conocer el fuego. Recuerda, las palabras son meros
símbolos. A menos que viertas en ellas un significado existencial, permanecerán
vacías. En las palabras no hay significado, el significado está en el individuo
y su experiencia.
Si Krishna usa la palabra «Dios», no
es una mera palabra. Es significativa, tiene un significado. El significado
viene de la vida de Krishna, el significado es vertido desde la consciencia de
Krishna.
Cuando Jesús usa la palabra «Dios»,
ésta es de suma importancia, está llena de gran significado. El significado
está en Jesús, no en la palabra «Dios», porque la palabra «Dios» había sido
usada por los rabinos a lo largo de las épocas, sin ningún significado. Jesús
vertió significado en ella. Transformó una palabra vacía en algo lleno de
sentido, significativo y vivo; la palabra empezó a pulsar.
Cuando Buda tocaba cualquier
palabra, está se volvía viva, le crecían alas. Repentinamente había una
metamorfosis.
Pero el docto sólo está lleno de
polvo, el polvo que ha juntado de libros y escrituras. Ten cuidado con tal
aprendizaje, es más peligroso que la simple ignorancia. ¿Por qué es más
peligroso que la ignorancia? Porque la ignorancia tiene una pureza; tiene en
ella inocencia y tiene una autenticidad. Es verdadera, y a partir de la verdad
hay una posibilidad de avanzar. El conocimiento, el así llamado conocimiento,
es falso. De la falsedad no puedes partir en un viaje de verdad.
Recuerda, no hay una diferencia real
entre el docto y el ignorante, excepto que el docto cree que sabe, y el
ignorante sabe que no sabe. Pero entonces el ignorante está en una posición
mejor.
No hay mucha diferencia entre el así
llamado docto y el que no es docto. Quizás la diferencia sea de palabras, de lenguaje,
pero no de cualidad. Su cualidad interna sigue siendo la misma.
Éste es uno de los fundamentos del
Sufismo que hay que entender:
el conocimiento es en vano si no ha surgido de
tu propia experiencia. Si no es parte de tu vida el conocimiento es una carga
totalmente innecesaria. Si te es agregado desde afuera, abandónalo. No cargues
con él innecesariamente. Es inútil, es dañino, es venenoso y es una carga. No
te permitirá moverte con rapidez.
Y cuantos más conocimientos juntes, menos
posibilidades tendrás de moverte.
OSHO