30/5/11

LA RECUPERACIÓN DEL PODER PERSONAL EN SHAMBALLA


Una de las cosas que  nos propone  Shamballa  como forma de vida es  la recuperación  de nuestro Poder Personal. El verdadero Poder interno es “un estado del ser” que es la capacidad de dar rienda suelta a la  expresión de nuestro Espíritu junto con la toma de decisión de estar consciente en cada uno de los momentos de nuestra vida.
Tenemos la idea equivocada de que el hecho de  desarrollar nuestro propio poder está reñido con la parte espiritual del ser humano, pero el verdadero poder es un sentimiento de fortaleza, confianza  y a la vez de humildad, que reconoce esa energía  y no necesita demostrar nada a nadie, ya que busca solamente la consciencia de nuestro centro interno y  actuando siempre desde ese centro, somos capaces de encontrar y tomar cualquier  decisión correcta y coherente con nuestra esencia Divina.
En realidad el hecho de recuperar ese poder lo podemos comparar con el acto  de recuperar nuestra brújula interna, que nos ayuda a encontrar el camino y la decisión adecuada en cada momento. Porque el poder que  manifestamos en el exterior surge de nuestro  propio interior, y allí es donde tenemos que buscar respuesta siempre que tengamos que decidir algo, da igual el tema que sea, incluso en aquellos  momentos en los que te sientas impotente ante una situación…, aún ahí  serás consciente de tu fuerza interior y ya no tendrás miedo ante los acontecimientos y obstáculos que puedan presentarse, porque se disipan las dudas y las inseguridades.
Cuando hablamos de nuestro propio poder personal, nos referimos también a la actitud que debemos tomar ante las cosas, sobre todo eliminando el temor y recuperando la  confianza en el futuro y en nosotros mismos, como seres sabios y merecedor@s de todo lo bueno que nos ofrece la vida.
Cuando  asimilamos esta valiosa información  nos volvemos  más capaces de afrontar los obstáculos que nos vamos encontrando en el camino, ya que empezamos a ser conscientes del hecho de que estos contratiempos son un aprendizaje para fortalecer nuestra alma y desarrollar nuestras capacidades internas.
Todos nosotros hemos recibido  en nuestra infancia y en nuestra sociedad una educación que nos ha marcado  a la hora de afrontar las situaciones que vivimos en la vida adulta. Debemos de eliminar esas creencias  de temor y desconfianza tan arraigadas, porque ellas no nos dejan realmente experimentar las posibilidades que el día a día nos ofrece y  tampoco nos permiten libremente COCREAR nuestra autentica estructura de vida y de creencias.
Cuando se adquiere el hábito de preocupase cada día  nos estamos cerrando puertas que nos impiden  avanzar, lo único que se  consigue es enfermar, estresarse y ser infeliz. Al estar condicionado por el miedo  se ha terminado por creer y  relacionar el  ser realista con lo negativo de la vida y el ser positivo y amoroso con ser irrealista.
 Nos han enseñado a esperar lo peor en cada situación. Pero debemos de ser conscientes de que el Universo está lleno de energía positiva y si estás dispuesto a conectar con ella TODO FLUIRA CORRECTAMENTE DE FORMA ARMONIOSA Y DE ACUERDO CON NUESTRO PLAN DIVINO, así que CONFIEMOS en que lo normal y natural es que nuestros proyectos lleguen a buen término.
Hemos de empezar a ser conscientes  que cada día cedemos pequeñas parcelas de nuestro poder  en muchas situaciones cotidianas, dejando decidir a otros sobre acontecimientos posiblemente vitales para nosotros, y por eso acabamos viviendo frecuentemente situaciones poco gratificantes que nos llenan  de frustración. Hay que empezar por reconocer  que somos nosotros mismos quienes realmente sabemos cuál es la opción acertada y verdadera para nosotros, solo así seremos auténticamente conscientes de nuestra implicación en los acontecimientos de nuestra vida.
 Al recuperar el centro de nuestro Poder interior se nos enciende una luz interna y se nos aclara la mente ante situaciones que antes no veíamos con claridad.
Este Poder nos ancla en la vida, nos hace recuperar la autoestima y la capacidad de solucionar todo lo que hasta el momento andaba del revés.
 Por eso es bueno  dar este paso, es una forma  definitiva de asumir las riendas de nuestro potencial interno, dejando que se muestre en  el exterior en cada uno de los momento que vivimos.

Bienvenidos a la libertad de pensamiento y acción..., 

Shamballa On,

Natividad Navarro